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Kherson: El triunfo de la Revolución en Ucrania

19.11.2022

El pueblo de Kherson festeja la liberación de la ciudad en la plaza central


Por La Marx International 14/11/22

Un enorme triunfo de los trabajadores y el pueblo de Ucrania se ha producido el 12 de Noviembre de 2022 con la toma de la ciudad de Kherson, la capital regional del sur de Ucrania. El triunfo de la batalla de Kherson implica una dura derrota para Putin y la contrarrevolución mundial. El pueblo de Ucrania festeja el triunfo revolucionario en Kherson que fortalece la lucha de todos los pueblos del mundo, y a los millones de activistas que llevan adelante una oleada revolucionaria global contra el capitalismo, tanto los huelguistas en Francia, Alemania, Inglaterra, etc. como las mujeres, y las masas movilizadas en Irán contra la dictadura, así como los pueblos movilizados en Haití, Palestina, El Líbano, etc,

La revolución del pueblo ucraniano enfrenta los intereses del grupo de oligarcas ex- stalinistas como Lukashenko, Yanukóvich, o Nazarbáyev que se hicieron obscenamente ricos vendiendo los bienes de las naciones de la ex Unión Soviética a las grandes corporaciones globales capitalistas. Al comenzar su lucha por la independencia, el pueblo ucraniano se convirtió en el principal desafío a la dictadura de éstos oligarcas privatizadores que respondieron a la revolución primero con la agresión, y ocupación ilegal de los territorios de Crimea, y el Donbas en el 2014, y luego con la invasión de Ucrania en el 2022.

Con el triunfo de Kherson también sufre un duro golpe el 99% de los grupos de la izquierda global, campista, stalinista, evasionista que se niega a apoyar la revolución del pueblo ucraniano. La Internacional Progresista encabezada por los lideres de la organizacion de Estados Unidos Democratic Socialist of America (DSA), junto a Yanis Varoufakis de Syriza, dirigentes como el laborista inglés Jeremy Corbyn, intelectuales como Noam Chomsky, la Revista Jacobin, los gobiernos de Cuba, México, Argentina, Venezuela, Nicaragua, y Lula en Brasil, los grupos stalinistas o la izquierda ex trotskista de varios países que apoyan al criminal de guerra Putin, con hipócritas llamados "a la Paz". El triunfo revolucionario de Kherson envía a todos éstos gobiernos, y grupos "progresistas" al basurero de la historia.

El triunfo de la batalla de Kherson, es el triunfo de una guerra revolucionaria de liberación nacional

Kherson era la única ciudad importante que Rusia había ocupado en el curso desde la invasión. Es una ciudad mayoritariamente ruso parlante pero sus habitantes se reivindican ucranianos, y apenas las tropas de Putin entraron, miles de ciudadanos salieron a movilizarse contra la invasión. Putin lanzó un falso referéndum declarando a Kherson parte de Rusia, pero quedó en ridículo al perder la ciudad sólo 45 días después.

El triunfo implica la recuperación de cientos de centros urbanos, y miles de kilómetros cuadrados de territorio, lo cual coloca a las tropas de Putin en una situación defensiva en la zona sur del país que es clave para el desarrollo económico por ser zonas de cultivo, y de accesos a los puertos del Mar Negro.

Desde el mes de agosto las tropas de Putin comenzaron a sufrir el desarrollo una estrategia de ataque permanente mediante bombardeo y atentados de los partisanos y guerrilleros combatientes a los puentes de la ciudad, los nudos de traslado de tropas, abastecimiento, galpones, y todo el suministro. Así las tropas de Putin fueron sufriendo una lenta y sistemática destrucción del todo su sistema de suministro logístico operativo. Los ocupantes quedaron rodeados, sin abastecimiento de comida, ni de armas, ni provisiones, lo que colocó a los mas de 40 mil soldados de Putin apostados allí, en una situación desesperante.

Los golpes con artillería provocaron pérdidas enormes en las tropas invasoras, y destruyeron los nodos logísticos clave para socavar las capacidades militares invasoras. La fuerzas de los soldados ucranianos comenzó a avanzar primero tomando la carretera Ordzhonikidze-Berislav, luego ocupando el pueblo de Dudchany, tras lo cual se produjo la expulsión de los invasores de la región de Dnepropetrovsk. Tras ello, se produjo la marcha hacia Kherson. Las tropas ucranianas lograron destruir los puentes que comunican las dos orillas del río Dnipro, cortaron el suministro de municiones y avituallamiento para los invasores.

Mientras tanto, las tropas invasoras en Jersón comenzaron a sufrir hambre, no tenian como curar a los heridos, a la vez que los colaboradores del invasor venían sufriendo atentados dentro de la ciudad, llevados a cabo por los partisanos. La permanencia del ejército de Putin se volvió insostenible, y la retirada se convirtió en cuestión de tiempo en la medida en que las fuerzas ucranianas se aproximaban a Kherson. La sombra de la derrota en Kharkiv sufrida por los invasores que huyeron en forma desesperada, comenzó a sobrevolar como un fantasma el sur de Ucrania.

Fue entonces cuando el ministro de Defensa del gobierno de Putin Sergei Shoigu, ordenó la retirada de las tropas al comandante de las Fuerzas Armadas Sergey Surovikin, el 9 de noviembre, en una reunión televisada que fue una verdadera payasada. Las imágenes muestran a Surovikin recomendando la retirada y Shoigu aceptando los dos militares trataron de simular la toma de decisiones, cuando en realidad habían sufrido una derrota que les imponía la necesidad de huir.

La revolución ucraniana destruye los planes de Putin y la oligarquía rusa

La explicación de porqué Putin está perdiendo la guerra es la movilización de masas de todo el pueblo ucraniano, y el apoyo de la movilización de masas mundial a su lucha. Para comprender el triunfo de Kherson se hace necesario ver la revolución de Ucrania como un todo, comprendiendo que Kherson es parte de una serie de batallas que han sembrado la derrota de Putin, primero, la batalla de Kiev comenzada el 24 de febrero que finalizó entre los días 19 y 20 de marzo del 2022, un conjunto de batallas en Hostómel, Bucha, Irpín, Brovary, Chernóbil, Ivankiv, Slavútych, Vasylkiv. Esta batalla culminó con un resonante triunfo que obligó a Sergei Rudskoi Jefe de la Dirección Operativa Principal del Estado Mayor General de Rusia, a anunciar la retirada de las tropas de Kiev el 25 de marzo del 2022.

Tras las derrotas sufridas por Putin se abrió una segunda etapa de la guerra en la cual no se trata ya de rechazar la invasión, sino de la expulsión de un ejército de ocupación que lleva 6 años usurpando y agrediendo las zonas ocupadas de Ucrania. Ésta una nueva fase la llamamos la Hora de los Partisanos, porque se trata de una ola de ataques, atentados, emboscadas, y armamento organizado por las masas entre los meses de mayo, junio, julio y agosto que fueron quebrando la moral de los ocupantes, y destruyendo al ejército invasor. Toda clase de atentados que fueron destruyendo paulatinamente las capacidad operativa de las fuerzas invasoras.

Por citar algunos ejemplos, la voladura de la base aérea militar de Putin en la región de Pskov, el ataque a la flota invasora en Sevastopol, el hundimiento del crucero lanzamisiles Moskva (Moscú) buque insignia de la Flota del Mar Negro, la voladura de las vías férreas a 30 km de Melitopol, la voladura de la base aérea de las tropas de Putin en Saki en la Crimea donde se destruyeron 20 aviones de combate, dejando 60 soldados muertos, y 100 heridos. El 10 de agosto del 2022 los Partisanos Bielorrusos atacaron al aerórodromo de Zyabrivka en Bielorrusia, y los Partisanos ucranianos volaron del puente de Kerch que une Crimea con Rusia el 14 de octubre. Los atentados eliminaron generales, oficiales, y soldados del ejército ocupante, y tambien sembraron el terror asesinando a colaboradores de la ocupación, funcionarios gobernadores, alcaldes, y otras autoridades colocadas por Putin en los territorios ocupados.

El 1ero de Octubre el ejército de Putin se desmoronó en la zona norte de Ucrania. Las fuerzas de Ucrania tomaron Lyman, entraron a los Oblast de Donestk y Lugansk donde capturaron Hrekivka y Makiivka, avanzaron y tomaron Izyum, luego tomaron Lysyschansk, avanzaron del río Siversky y luego tomaron los accesos a Slovyansk. Las tropas de Putin comenzaron una huída desesperada, y masiva, dejando atrás armamento decenas de tanques, todo tipo de armas y municiones, y huyendo de localidades, algunas de ellas de gran importancia estratégica. Tras los triunfos de Kiev, Summy, la oleada de ataques de la resistencia ucraniana, y la caída de Kharkiv, sobrevino la victoria de Kherson el 12 de Noviembre.

Sólo se puede entender la victoria de Kherson viendo de conjunto las batallas que el pueblo ucraniano viene ganando mediante una combinación de organización popular, movilización, valentía, y proezas militares, que han puesto de rodillas en apenas 8 meses a un ejército infinitamente superior. El general Mark Milley, jefe del Estado Mayor Conjunto de EE. UU estimó en cerca de 100.000 las bajas en las tropas de Putin lo cual es un verdadero desastre militar. Comparando con las bajas de la OTAN en Irak, la OTAN tuvo 44.000 bajas a un promedio de 15 bajas por dia entre muertos y heridos en 8 años, entre 2003, y 2011. Ahora Putin duplica esa cifra en tan sólo 9 meses, a un promedio de 370 bajas diarias, una cifra horrorosa que por sí sola muestra la tremenda paliza que está recibiendo el ejército de los oligarcas rusos en Ucrania.

    Imágenes de la paliza militar sufrida por Putin en 8 meses


El rol de los partisanos, y los guerrilleros por la libertad

En el desarrollo de esta revolución, el valiente pueblo de ucrania ofrenda sus vidas frente a los cobardes y facistas ataques de Putin sobre la población civil, y las masacres. Dada la inferioridad militar del pueblo ucraniano, la paliza que le han propinado a Putin ha sido en base a un alto costo de vida humanas. El Estado Mayor Conjunto de EE. UU estimó en cerca de 100.000 las bajas en las tropas de Ucrania, y alrededor de 40 mil civiles muertos, un verdadero horror similar al que han sufrido pueblos como el vietnamita, o el iraquí en sus respectivas guerras de Liberación Nacional contra los Estados Unidos, y la OTAN. Pero la paliza que un ejército infinitamente inferior como el ucraniano le está propinando a uno superior, se explica por el rol de la movilización de todo el pueblo, junto a un extraordinario proceso de autoorganización armada de miles de combatientes guerrilleros, los partisanos ucranianos, apoyados por toda la población.

Toda revolución genera organizaciones de doble poder, que expresa la lucha de los oprimidos, los explotados, y la democracia directa de quienes toman las decisiones para que la revolución triunfe. La revolución ucraniana ha generado los cuerpos de Partisanos, guerrilleros por la libertad: Campesinos, mujeres, obreros, jóvenes que empuñan las armas luchando por liberar su tierra, y familias que retoman la tradición europea de los partisanos franceses, italianos y yugoeslavos, rusos, bielorrusos, ucranianos, y griegos contra la ocupación nazi. Los Partisanos ucranianos surgieron en la lucha contra la ocupación ilegal que Putin hizo de las regiones ucranianas en el 2014, pero luego de la batalla de Kiev de febrero- marzo del 2022, se extendieron por todo el país.

Los partisanos ucranianos organizan atentados, emboscadas, llevan adelante vigilancia, e inteligencia obteniendo datos que envían al ejército regular. Es un verdadero "Ejército en las Sombras" que mantiene estrecha relación con el ejército regular, pero también lleva adelante acciones independientes porque conserva autonomía e independencia del gobierno, y el estado ucraniano. Esto tiene un aspecto fundamental cuando se trata del monopoplio de las armas. Como lo informan los soldados ucranianos de la 93ra Brigada Mecanizada operando en Donestk, ellos combaten con todo lo que capturan a los ocupantes.

El 80% de las armas con que cuentan los ucranianos, son las robadas a las tropas de Putin, y solo el 20% proviene de la OTAN. Los Partisanos han establecido un sistema de trueques entre las fuerzas ucranianas, que funciona como una especie de economía paralela o mercado informal en todo el frente de batalla, donde las armas o equipos capturados por las unidades de combate son intercambiadas por los pertrechos que necesitan con mayor urgencia. Aunque los soldados admiten que supuestamente deberían enviar los equipos capturados a Kiev para ser ingresados a los registros oficiales, prefieren intercambiarlos directamente entre ellos por redes sociales.

Los partisanos saben que esas armas pueden no volver a sus manos, y prefieren manejar el control, intercambio, y asignación de las mismas directamente ellos mismos. La "democracia directa" se ejerce aquí decidiendo los propios combatientes el destino del armamento que pasa por sus manos. La existencia de cuerpos armados de trabajadores, jóvenes, mujeres auto organizados, que manejan gran parte del armamento existente implica un desarrollo de poder dual, un desarrollo "soviético", como lo explica el periodista catalán, y reportero de guerra Plàcid Garcia-Planas.

Esto significa que el estado capitalista ucraniano no tiene el monopolio de las armas, el ejército de ucrania tampoco, y gran parte del desarrollo del frente de guerra se lleva adelante por sectores autoorganizados de masas, tal como ocurrió en la lucha contra el ejército ocupante nazi en la 2da Guerra Mundial por los partisanos franceses, italianos, griegos, rusos, ucranianos y yugoeslavos. La sola existencia de los partisanos, al frente de un proceso revolucionario que se lleva adelante en medio de una brutal crisis del capitalismo a escala global, en el marco de una crisis, y fractura de las clases dominantes en Europa, y en Rusia, deja claro que lo que está ocurriendo en Ucrania es una revolución con todas las letras que los marxistas debemos apoyar con todas nuestras fuerzas. 

El periodista catalán, y reportero de guerra Plàcid Garcia-Planas explica el carácter "soviético" de los Partisanos en Ucrania


Es la existencia de este cuerpo de Partisanos, que actúan como un verdadero poder dual que han convertido a Melitopol, ciudad ocupada por la tropas de Putin, en la capital partisana del país, y símbolo de la resistencia con miles de combatientes, es la señal que prepocupa a las clases dominantes europeas, al imperialismo de EE.UU, la OTAN, y el gobierno de Zelensky. Por eso el triunfo de Kherson es también un golpe para todos ellos, en la medida en que legitima, y consolida a los Partisanos como fuerza que actúa ya públicamente, pero que constituye siempre un peligro para las clases dominantes.

Los saboteadores ucranianos ingresan a bases militares que se encuentran a 600km de la frontera, preparan atentados, y llegan allí donde el ejército regular no puede llegar. Eso hace que las tropas de Putin no puedan estabilizarse nunca, y cuando creen que pisan firme, los atentados se producen a sus espaldas desconcertando a los invasores, sorprendiendo al enemigo con sus operaciones. El ataque a la flota rusa en Sevastopol, la voladura del puente que une Crimea con Rusia, la eliminación de generales y oficiales, la voladura de vías férreas en territorio ruso, bielorruso y muchísimas más operaciones, son las que fueron definiendo el curso de las batallas.

A su vez, la actividad partisana, y el temor a las agresiones de Putin, ha llevado a la extensión del fenómeno a otros países como Georgia, Finlandia, y Bielorrusia, donde se esta desarrollando un proceso de armamento popular. La presión de las masas de los países europeos, el crecimiento de los partisanos en Ucrania, y la extensión de este fenómeno a los países del este, es la única razón por la cual la OTAN provee con cuentagotas de armas a Ucrania. El cambio de política de los gobiernos imperialistas tiene que ver esencialmente con el objetivo de controlar las acciones en el teatro de guerra, y que el desarrollo de la misma esté bajo las decisiones de los gobiernos imperialistas, no de las masas. Los Marxistas estamos, sin duda alguna, del lado de los partisanos, independientemente del estado actual de su conciencia, porque en su acción de armarse y defenderse de la ocupación, abren el camino a la revolución obrera. Nuestro centro es defenderlos, apoyarlos y presentar nuestro programa y política partiendo de la base de defender los derechos, y reclamos de los obreros ucranianos armados.

La siniestra política de la OTAN: Las "negociaciones de Paz"

La OTAN aparece festejando el triunfo de Kherson, el ministro de Defensa de Gran Bretaña Ben Wallace lo calificó como "otro fracaso estratégico" para Moscú, mientras el presidente de EE.UU Joe Biden dijo que el repliegue de las tropas rusas de la estratégica ciudad ucraniana de Kherson demuestra que Moscú tiene "problemas reales" en la guerra, lo mismo Macron el presidente de Francia ha dicho que la recuperación de Kherson es "un paso importante". Los analistas insisten en que el triunfo fue producto de la "entrega de armas de la OTAN a Ucrania". Todos estos hipócritas jefes imperialistas mienten igual que los campistas, son todas declaraciones de compromiso para quedar bien ante las masas que apoyan masivamente a Ucrania, pero también para ocultar el rol siniestro de la OTAN en Ucrania.

La OTAN se ha negado a proporcionar a Ucrania un escudo balístico que hubiera salvado miles de vidas. Ha dejado de proveer armas durante meses a Ucrania entre junio, julio y agosto lo que permitió a Putin ganar batallas y asesinar a miles de ucranianos. Cuando proveyó armas, la OTAN lo hizo de forma limitada, negandose a entregar armamento estratégico, y lo que entregó fue solo por la presión de las masas en Estados Unidos, y Europa que se niegan a aceptar un genocidio en el corazón de Europa. Por eso, el triunfo de Kherson se produce a pesar de la OTAN, y a pesar de los intentos del imperialismo de frenar, y controlar la revolución ucraniana.

Pero a partir del triunfo de Kherson, el imperialismo de EE.UU, los gobiernos imperialistas de Europa, y la OTAN están presionando por una "salida negociada" y un "Acuerdo de Paz" que termine con la guerra en Ucrania. El imperialismo, y los líderes de la OTAN buscan impedir el desarrollo, y profundización de la revolución ucraniana con el objetivo de estabilizar políticamente Europa, y la situación mundial. A ninguno de los gobiernos imperialistas europeos les interesa tener una guerra con miles de trabajadores armados en el corazón de Europa que estan destruyendo el ejército de una de las dictaduras más importantes del mundo. Por eso el presidente del gobierno imperialista de Francia Emanuel Macron también insiste desde junio en promover el "Acuerdo de Paz" política que se profundiza ahora tras el triunfo de Kherson.

También el presidente del gobierno imperialista de Alemania expresa su posición a favor de una "salida negociada", mientras su canciller Olaf Scholz, bloqueó la entrega de equipos pesados por parte del fabricante de armas alemán Krauss-Maffei Wegmann (KMW) a Ucrania. El mismo gobierno capitalista de Zelensky está llevando adelante esta política y se ha prestado a esta maniobra presentando en la reunión del G20 diez puntos para arribar a un "Acuerdo de Paz". Mientras Zelensky presentaba la propuesta en el G20, Putin lanzaba otro brutal ataque misilístico contra infraestructura crítica, y población civil indefensa, y vulnerable. La izquierda campista, evasionista, y stalinista que está "Por la Paz" se da de la mano con los gobiernos imperialistas, y actúan como sirvientes de su política. 

En este momento, que vivimos la victoria de Kherson, la izquierda reformista se da la mano con el imperialismo norteamericano y europeo para impulsar un acuerdo de paz. Entre estos sectores está la Internacional Progresista, y el EZLN de México, que en una posición aparentemente "independiente", le capitulan a Vladimir Putin haciendo un llamado demagógico a la paz "contra todas las guerras capitalistas". En el caso del EZLN de México, su política de capitulación al imperialismo es una muestra de los límites del las corrientes autonomistas, y anarquistas, que tienen un programa escencialmente reformista.

Hoy más que nunca, debemos considerar cualquier llamado de paz como una traición al pueblo ucraniano y al mismo tiempo, una capitulación a la política de Zelenzky, el imperialismo de EE.UU, de la UE, Vladimir Putin y la oligarquía Rusa. Los gobiernos capitalistas e imperialistas buscan que las masas de Ucrania pierdan en la mesa de negociación lo que ha ganado en el campo de batalla a costa de sangre del pueblo. Los Marxistas estamos con los partisanos y apoyamos la guerra revolucionaria de liberación nacional desde un principio y la seguiremos apoyando hasta sus últimas consecuencias, rechazamos todos estos hipócritas llamados a la negociación, rechazamos todos estos "Acuerdos de Paz" , y llamamos a todas las organizaciones populares democráticas, los partisanos a redoblar la ofensiva para expulsar a Putin de Ucrania sin negociar ni un milímetro de la tierra usurpada, y robada por los invasores.

    Los Partisanos de Ucrania explican como actúan contra los invasores y los colaboradores 


La crisis política del ejército, y el régimen de Putin

La paliza que la revolución ucraniana está infligiendo a Putin ha abierto una crisis política en el ejército, y el régimen político impuesto por la olgarquía que controla la Federación Rusa. Las sucesivas palizas militares obligaron a la convocatoria a un reclutamiento de la población por parte de Putin, pero la respuesta del pueblo ruso a la convocatoria fue el masivo rechazo expresado en que nadie quiere ir a combatir a Ucrania. Millones de ciudadanos rusos huyeron por las carreteras a países limítrofes para evitar ser alcanzados por los reclutadores del gobierno.

Crecen los informes de la baja moral de las tropas rusas, abundan los informes de deserción, mensajes de los soldados rusos que ya no creen en el discurso de Putin. Les dijeron que iban a combatir a Ucrania para "derrotar al nazismo" y se encontraron con millones de familias, mujeres, y niños que los odian y rechazan porque los ven como un ejército de ocupación. Cada día que pasa se agrava la crisis del ejército de Rusia, mientras crece también el rechazo a la guerra, y el aislamiento del régimen de Putin dentro de Rusia, un gobierno que se encuentra aislado también internacionalmente producto que las masas del mundo apoyan masivamente a Ucrania. También aparecen mensajes de soldados que se resisten a seguir peleando, muestran insubordinación y denuncian que son brutalmente reprimidos por sus superiores.

La crisis por las derrotas ha llevado a los sectores de ultraderecha, y nacionalista rusa a criticar abiertamente al estado mayor del ejército ruso. El sector llamado "siloviki" encabezado por el los jefes de los comando de mercenarios Wagner, la empresa de mercenarios creada por el régimen de Putin que actúa en Chechenia, en Siria, y en África, sectores representados por el jefe de los mercenarios chechenos Ramzan Kadyrov, y el financiero del Grupo Wagner Yevgeny Prigozhin. Kadyrov y Prigozhin atacan el enfoque más tradicional y convencional de la guerra perseguido por el Ministro de Defensa ruso Sergey Shoigu y el comando militar uniformado.

De este modo, se está abriendo en el régimen político, y el ejército de Rusia, la misma crisis que se abrió en el ejército, y el gobierno de Estados Unidos en el año 2005 frente a la derrota en Irak. En 2005 en medio de las derrotas en Irak estalló la crisis entre el jefe del Pentágono Donald Rumsfeld, que pugnaba por una mayor intervención de los mercenarios y la privatización del ejército norteamericano basada en el grupo mercenario "BlackWater", enfrentado a los altos mandos militares que seguían con la línea del ejército basado en los soldados regulares y el reclutamiento popular. Ahora en Rusia tras los sucesivos colapsos del ejército en Ucrania se agravan las tensiones públicas entre el campo Kadyrov-Prigozhin, que ataca públicamente al Ministerio de Defensa y al ejército uniformado por su mal manejo de la guerra.

Los soldados rusos están desmotivados, sin apenas pertrechos y en muchos, sus mandos los han abandonado, muchas unidades carecían de raciones alimenticias y en muchos casos estiraban varios días la comida. Mientras en Rusia los ciudadanos huyen del país ante la convocatoria de Putin, en Ucrania miles y miles de mujeres y jóvenes voluntarios se suman a las filas para luchar. Las mujeres tomando tareas de defensa a la par de los hombres y los sindicatos sumando trabajadores a las fuerzas territoriales. El problema para Putin, y las Fuerzas Armadas de Rusia, y como lo fue para el Pentágono y la Administración Bush en el año 2003, es que se toparon en Ucrania con el mas moderno concepto de revolución que historia puede ofrecerles: La guerra de guerrilas urbana. 

Durante la guerra de ocupación del imperialismo norteamericano contra Irak, se inauguró un nuevo tipo de guerra de guerrillas, con su epicentro en las ciudades, que logró vencer al imperialismo norteamericano. Basado en Bagdad, Mosul, Basora, o Faluya, este nuevo tipo de "guerra revolucionaria" con epicentro en los centros urbanos, es diferente a la guerra de guerrilas que caracterizó a revoluciones del siglo XX, como la mexicana, la china, la cubana, o la vietnamita, que fueron revoluciones desarrolladas fundamentalmente en el campo. Los cambios operados en los regímenes de acumulación capitalistas, el surgimiento de las multinacionales, y las corporaciones globales a mediados del siglo XX, produjo la concentración de grandes masas en las ciudades, el desarrollo de las grandes urbes, y megalópolis.

Las revoluciones del siglo XXI, a diferencia del siglo XX, son predominantemente urbanas. Justamente lo que estamos viendo en Ucrania, el más moderno prototipo de revolución, como lo son los levantamientos de Hong Kong en el 2011, las movilizaciones en Grecia, Occupy en EE.UU en 2011, y Black Lives Matter en 2020, el "Chile despertó" del 2019, el "Paro Nacional" en Colombia, los "chalecos amarillos" en Francia del 2019, sólo por citar algunos ejemplos. Son procesos revolucionarios urbanos con elementos de auto organización armada, y autodefensa que caracterizan a las sucesivas oleadas revolucionarias.

No es casual que cuando mencionamos las batallas que constituyen la revolución Ucraniana lo hacemos con nombre de ciudades, Kharkiv, Kiev, Kherson, etc. Esta "guerra revolucionaria urbana" está haciendo volar en mil pedazos al ejército de Putin, y abriendo la crisis del régimen político. Los Marxistas reclamamos por la libertad de los presos políticos en Rusia, estamos por el derrocamiento de Putin, el llamado a la desobediencia popular, la desobediencia de los soldados a sus superiores, y contra el reclutamiento de los oligarcas!

¡Juicio a Putin y los criminales de Guerra!, ¡No a la reconstrucción capitalista de Ucrania!

En la medida en que Putin va perdiendo la guerra, su régimen de oligarcas se vuelve mas peligroso. La respuesta de Putin a las derrotas ha sido agravar los crímenes de guerra, las masacres, los ataques y bombardeos indiscriminados a la población civil, a escuelas, hospitales, centrales eléctricas para dejar, sin agua, o sin luz ciudades enteras. Toda la cobardía de estos oligarcas se muestra claramente en sus ataques a los mas vulnerables, niños, ancianos, familias, y sus bravuconadas anunciando "ataques nucleares". Son en realidad, manotazos de ahogado de quienes están cada vez mas débiles.

Los funcionarios rusos de ocupación están deportando niños, y llevando adelante limpieza étnica en los territorios ocupados. Los crímenes de guerra de Putin y los oligarcas deberán ser juzgados por Tribunales establecidos por el pueblo de Ucrania, los Partisanos, y quienes han combatido y enfrentado sus crímenes además de los familiares de las víctimas. Deberán ser llevados a cabo por tribunales completamente independientes de organismos imperialistas como la ONU, responsable de las masascres en Irak, o de los gobiernos capitalistas, o imperialistas

Frente a los graves problemas de desabastecimiento, de transporte de insumos, y de energía, el gobierno de Zelensky tomó el control de cinco empresas que tienen vínculos con algunos de los oligarcas más poderosos del país. El gobierno incautó las acciones de la empresa de motores Motor Sich PJSC, de la petrolera pública Ukrnafta PJSC, que pertenecen al oligarca Igor Kolomoisky. Las autoridades también se hicieron de las acciones de la empresa decamiones Avtokraz, la empresa industrial Zaporizhtransformator PJSC y la empresa de refinación de petróleo Ukrtatnafta. El objetivo de estas expropiaciones son el mantenimiento del suministro de combustible y la restauración y reparación de equipos.

Las empresas ahora serán administradas por el Ministerio de Defensa. "A partir de hoy, los activos especificados se gestionan en nombre del Estado y en interés de todo el sector de seguridad, para satisfacer las necesidades de las Fuerzas Armadas y de todo el sector de defensa", dijo Oleksii Réznikov, el Ministro de Defensa de Ucrania. La expropiación, y estatización de grandes empresas de Ucrania en medio de la guerra, dejan a las claras que la revolución ucraniana, y la reconstrucción de Ucrania son incompatibles con el capitalismo, y las ganancias de los oligarcas, banqueros, y grandes empresarios.

Frente a todo intento de impulsar una "reconstrucción capitalista de Ucrania", o "Plan Marshall para Ucrania" de parte del imperialismo de EE.UU, o Europeo, los marxistas estamos por un plan económico que continúe la expropiación del gran capital ucraniano, y ruso, y de las Corporaciones imperialistas. Si bien Rusia no es un país imperialista, sino una sub- metrópoli con un PBI pequeño, y que no cuenta con empresas que dominan la economía mundial, el capital ruso debe ser expropiado al igual que el capital imperialista para resarcir los crímenes de guerra cometidos por los oligarcas contra Ucrania.

Los socialdemócratas, y reformistas, llamarán a confiar en el capitalismo. ¿Puede el pueblo de Ucrania creer que Wall Street, la "troika" Europea conformada por la Unión Europea, el Banco Central Europeo, o el Fondo Monetario Internacional reconstruirán Ucrania? Los delincuentes funcionarios de estos organismos destruyeron a Grecia, y vienen destruyendo las economías de todos de los países más pobres y vulnerables. Wall Street rescata a banqueros y millonarios, mientras hunde en la pobreza a miles de millones de personas en todo el mundo. ¡Ninguna reconstrucción será favorable a los trabajadores y el pueblo de Ucrania de la mano de estos estafadores, y hambreadores globales!

Los Marxistas convocamos a los revolucionarios ucranianos, de Europa y del todo el mundo a reagruparnos y construir una organización revolucionaria que convoca a los trabajadores y el pueblo de Ucrania a no tener ni un milímetro de confianza en los capitalistas, ni las Corporaciones, a quienes solo les interesa sus ganancias. Estamos por que Ucrania siga siendo independiente de la OTAN, de la UE, y que los partisanos tengan en las armas en las manos hasta que no quede un soldado de Putin en Ucrania. Y luego, seguir con las armas en la mano para continuar la revolución hasta imponer un gobierno obrero y popular, apoyado en la organizaciones sociales, los Partisanos armados, y los sindicatos, e imponer una Ucrania Socialista. ¡Fuera los capitalistas y oligarcas que sólo quieren hacer negocios en base a la sangre y los muertos del pueblo! ¡Viva el triunfo revolucionario de Kherson! ¡Viva la Revolución de Ucraniana!

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